Nos reencontramos y tuve sexo con mi exnovio 

Me casé hace 5 años, justo cuando apenas me había graduado de la universidad hacía solo un par de meses atrás. Durante mi vida universitaria no hice muy buenas amistades, sin embargo, las personas con las que crecí en la preparatoria, todo el tiempo siguieron siendo importantes para mí. Éramos un grupo de 10 diez personas y desde que nos graduamos de bachillerato, acordamos hacer un reencuentro cada cierto tiempo para no perder el contacto. Hoy les voy a contar cómo fue que en uno de esos reencuentros tuve sexo con mi exnovio. 

Aunque al principio cumplíamos con nuestro ritual de reunirnos anualmente, con el tiempo perdimos el interés en ello hasta que dejamos de hacerlo por completo. Habían pasado varios años ya desde la última reunión con mis amigos de bachillerato. De hecho, en los 5 años que llevo de casada, nunca nos habíamos juntado. 

Por alguna razón a Carlos, uno de los chicos, se le ocurrió la idea de invitarnos a todos a su casa de campo. Así volveríamos a vernos todo y a ponernos al día en cómo iban nuestras vidas.

Acordamos una fecha y todos acudimos al sitio indicado ese día. Estando allí comimos, bebimos y jugamos muchos juegos con los que solíamos divertirnos de adolescentes. Pese a que nos estábamos divirtiendo mucho, yo me sentía muy incómoda, ya que allí estaba presente Daniel, mi exnovio. 

En un momento dado, Daniel se acerca a mí y me saluda. No sabía cómo actuar, así que me limite a tratarlo como a cualquiera de los otros chicos. 

Tuve sexo con mi exnovio después de mucho tiempo 

Él intentaba establecer una conversación conmigo, sin embargo, yo no podía hacerlo porque todavía estaban en mi mente todas las cosas que pasamos en nuestra relación. Fuimos novios durante todo el bachillerato, de hecho, estaba convencida de que él sería mi esposo y padre de mis hijos. 

Traté de sacar los recuerdos de mi cabeza y conversar con él sin problemas. Daniel se sentó a mi lado y por un momento pude olvidar las cosas malas, convenciéndome de que no habían pasado. 

Mientras nuestros otros amigos tenían conversaciones aparte, él y yo nos dedicamos a hablar sobre nuestras vidas, poniéndonos al tanto de todo por lo que habíamos pasado. Me pude dar cuenta de que la química entre los dos todavía era muy fuerte y muy evidente; ya que nos dedicamos a hablar de ambos y perdimos la noción del tiempo o de lo que estaban haciendo los demás. 

Allí aprovechamos para hablar de las razones que habían entorpecido nuestra relación y llegamos a la conclusión de la culpa fue de ambos y de nuestra inmadurez. No sé por qué, pero sacar las cosas que tenía por dentro desde hace tantos años, me hicieron sentir una paz interna muy agradable. 

Ya se había hecho de noche y nuestros amigos nos informaron que ya se iban a sus casas, asíi que yo también podía hacerlo sin problemas. Sin embargo, en lugar de eso, acepte la invitación de Daniel de ir a un bar para seguir conversando y bebiendo. 

El sexo con mi exnovio me hizo recordar todo el placer que me daba 

Llegamos a un lugar cercano con música electrónica muy fuerte, por lo que para poder seguir conversando teníamos que acercarnos al oído del otro. Allí me dijo que había encontrado una buena mujer y que tenía una hija, esto fue algo que me hizo sentir celos, porque yo habría querido ser esa mujer. 

Me di cuenta de que estaba coqueteando conmigo y a mi cabeza vinieron los recuerdos de lo bueno que era en la cama y que nadie me había dado tanto placer cómo él.  Eso me hizo sentir muy mojada y mi vagina empezó a palpitar. 

Sin pensarlo me abalancé sobre él y lo besé apasionadamente. Daniel no opuso resistencia y con una de sus manos empezó a acariciarme en el interior del muslo. Se acercó a mi oído y me dijo que fuéramos a un motel a pasar la noche. Me sonrojé y dejé que tomara mi mano para conducirme al lugar. 

Nos reencontramos y tuve sexo con mi exnovio Llegamos a la habitación y llevamos algunas botellas de vino. Seguimos bebiendo y nos recostamos en la cama uno de muy cerca del otro. De repente, se acercó aún más a mí y empezó a depositar sus besos sobre mi cuello. Lo abracé con fuera y jadeaba pidiéndolo dentro de mi cuerpo. 

Con prisa nos desnudamos uno al otro y nos besábamos salvajemente. La intensidad que teníamos era tan grande que mis bragas estaban completamente mojadas. 

Le fui infiel a mi marido teniendo sexo con mi exnovio 

Daniel dejó mi boca en paz y fue hasta mi pecho para devorar mis pezones como solía hacerlo hace tanto tiempo. Yo gemía bajo sus toques. 

Acomodó su cabeza entre mis piernas y chupó mi clítoris con pasión. Mi vagina soltaba a chorros sus jugos y yo solo podía gemir de placer, hasta que me hizo gritar de éxtasis al meter su lengua dentro de ella. 

Yo estaba muy caliente y quería sentir su pene dentro de mí. Le rogué que me follara porque no podía seguir esperando más. 

Obedientemente, se subió encima de mí y metió su polla dentro de mí, empujándola con el ritmo que sabía que me gustaba. Sonidos de gemidos y jadeos llenaron la habitación, al son de los ruidos que emitían nuestros cuerpos al tocarse. 

Cambiamos de posición y me subí encima de él. Moví la pelvis tal como tanto le gustaba cuando éramos adolescentes. Él soltaba esos gemidos que me excitaban tanto y eso me hacía moverme cada vez más rápido. El placer era tan inmenso que su polla estalló su semen dentro de mí y un par de segundos más tardes mus jugos explotaron sobre él. 

Había tenido sexo con mi exnovio y me había hecho recordar todo el placer que solo él sabía darme cuando apenas era una adolescente. Desde entonces nos vemos cada ciertas noches para recordar viejos tiempos.