Fui a una reunión en casa de un amigo y terminamos haciendo un cuarteto

En este blog voy a contar como fue la vez que fui a casa de un amigo y terminamos haciendo un cuarteto, que rico la pasé esa noche. Mi nombre es Clara, tengo 18 años y me gusta divertirme mucho, salir a fiestas y disfrutar de la presencia de los chicos, muchos dicen que soy una mujer muy coqueta. Yo tengo un grupo de amigos bastante alocado, siempre nos reunimos para hacer rumbas, salir a la ciudad y a beber en la casa de alguno de ellos.

En mi grupo de amigos están: Luis, Ezequiel, el hombre que me fascina que se llama Pedro y yo, siempre andamos haciendo locuras por todas partes. A pesar de que siempre andamos planeando que vamos a hacer los fines de semana, teníamos mucho tiempo sin veros y no habíamos organizado nada. Por eso, decidimos reuniremos en casa de Luis que siempre estaba sola y era perfecta para tener sexo salvaje, soy una puta muy golosa.

Le dijimos a Luis y dijo que le parecía una idea excelente, empezamos a comprar licores finos, el equipo de sonido y todas nuestras perversiones que teníamos en mente. Eso era para la noche, entonces yo me comencé a arreglar desde temprano para estar preparada en caso de emergencia, estaba muy ansiosa por la reunión. Terminamos haciendo un cuarteto y fue lo mejor del mundo. Me vestí con una ropita muy sexy que hacia que se me vieran mis hermosas nalgas y mis senos, mi objetivo era excitar a esos muchachos.

Les contaré como terminamos haciendo un cuarteto

Llego la hora de ir a casa de Luis para empezar a divertirnos y alocarnos, los muchachos me pasaron a buscar a mi casa y nos fuimos a casa de Luis, que de hecho quedaba bastante cerca. En el momento en que llegamos colocamos las bebidas en la nevera, pusimos los snacks en la mesa y empezamos a conversar mientras comíamos algo antes de beber.

Los muchachos estaban muy divinos esa noche, se habían puesta una ropa muy sexy y unos pantalones que hacía que se les marcara el pene y se les viera muy grande y grueso, yo me sentía en el paraíso. Todos son muy lindos y carismáticos, si embargo, el que más llamaba mi atención era Pedro, siempre olía rico y tenía unas habilidades de seducción que hacían que mi vagina palpitara de placer. Pedro y yo siempre andamos muy pegados, tenemos bastante afecto y ya hemos tenido encuentros de este tipo en otras ocasiones, me fascinaba sentir su pene dentro de mí.

Duramos 1 hora sentados en la mesa comiendo y luego decidimos irnos al cuarto de mi amigo Luis porque es bastante cómodo y entretenido. Entonces sacamos las botellas de la nevera y servimos en unos vasos grandes repletos de hielo, yo estaba consciente que me iba a rascar y me iban a coger durísimo, así fue que terminamos haciendo un cuarteto. En el cuarto empezamos a tomar mientras escuchábamos música y nos alocábamos bailando, fue un momento bastante épico y nos divertimos muchísimo, los muchachos se estaban poniendo algo ebrios y alocados.

Se estaba comenzando a excitar mucho y yo ni se diga

en un momento Pedro y yo estábamos acostados en la cama, él me estaba besando muy sensual y yo estaba montada encima de él, fue muy excitante. Ezequiel y Luis vieron lo que estábamos haciendo y se empezaron a excitar, luego siento que Luis me agarra por las nalgas y Ezequiel me empieza a lamer la oreja, no podía creer lo que estaba pasando. Estaban manoseándome y yo me sentía como si estuviera en un video porno, el placer que estábamos sintiendo no tenía comparación todo estaba muy rico y mi vagina me palpitaba.

Yo: uhh que rico, nunca me imaginé que terminaría haciendo algo así, me fascina como tengo 3 hombres encima de mí mientras me dan placer, deseo que me cojan como si fuese su puta.

Pedro: ando con la verga parada, desde aquí puedo oler tu vagina toda húmeda y excitada, ya estoy ansioso por destrozártela toda.

Luis: mierda, como me excita esta situación, me los voy a coger a todos si siguen hablando. Que rico se siente ver a Clara toda abierta cuando estamos a punto de meterle la verga entre toditos.

Yo me sentía bastante excitada, un tanto nerviosa también, pero no me importaba nada porque iba a cumplir una de mis fantasías sexuales, terminamos haciendo un cuarteto y me fascina poder decirlo. Los muchachos empezaron a quitarse la ropa y Pedro me desvistió dejándome completamente desnuda para que me destrozaran entre los 3. Sentía frío, pero no me importaba porque en unos segundos iba a tener muchos pipes para que me calentaran como a una zorra.

terminamos haciendo un cuarteto en la casa de Luis

Todos nos acostamos en la cama y Pedro fue el primero que me empezó a penetrar, los muchachos se quedaron manoseándome el culo y pasándome su verga por la cara. Me estaba empezando a relajar mucho, estábamos muy excitados los muchachos tenían penes muy gruesos y enormes, ya quería que pedro me acabara para continuar con el siguiente. Yo estaba montada arriba de Pedro y él me estaba bombeando durísimo, Luis me estaba dando nalgadas por detrás y me empezaba a chupar el culo, su maldita lengua me estaba haciendo enloquecer del placer.

Yo: aa uhh que rico, nunca me imaginé que íbamos a terminar cogiendo entre los cuatro y me iban a dar pipe entre toditos, me siento como una puta golosa y no quiero que acaben nunca.

Pedro: es que tu eres una maldita puta golosa así que cállate a menos que quieras que te rompa el culo también, me prende estar aquí cogiéndote en frente de los chicos.

Pedro estaba muy excitado y los muchachos seguían manoseando me y dándome nalgadas mientras recibía del suculento pene de mi papi. Después de 10 minutos me sacó su pene y me eyaculó en las tetas, fue muy rico y Ezequiel me las limpio con su lengua. Fue demasiado sádico y me fascinó, luego Ezequiel se montó encima de mí y me empezó a cabalgar como si fuera su pony sexual, su regazó hacía que mi vagina se dilatara.

No puedo creer que terminamos haciendo un cuarteto y me sentí tan satisfecha

Luis se amotinó y me empezó a pasar su pene por la cara, de un momento a otro me abrió la boca y me lo metió completico como si fuese un helado de frambuesa. Estaba recibiendo pene de Ezequiel por la totona, el de Luis por la boca y Pedro me estaba dedeando el culo, yo me sentía como una maldita conejita Playboy, estaba recibiendo placer por todos lados.  Me encantó que a pesar de todo terminamos haciendo un cuarteto en la casa de Luis, que rico era coger en su cuarto mientras escuchábamos música de “The Weeknd”.

Yo me estaba atragantando con el pene de Luis, era demasiado delicioso y estaba ansiosa por hacer que botara toda su leche dentro de mi boca, mi madre desde pequeña me enseño que debía tomarme mi lechita antes de dormir. Ezequiel estaba dándome muy rico con su enorme boa, que rico la pasamos todos esa noche, andábamos gozando mucho, tener muchos penes dentro de mí me hace enloquecer.

Ezequiel me estaba insultando y eso me causaba mucha excitación, me dijo que era su maldita zorra y que quería vestirme con un traje de Pokémon para meterme su pokebola por la chocha. Como me prendía cuando se ponía salvaje, después de 15 minutos de insultos sexuales sin sentido me echo todo su semen en la cara. Luis sacó su venoso sangriento de mi boca, me metió una cachetada con su pene se me empezó a meter su polla por mi culito. Que rico que terminamos haciendo un cuarteto.

Y así fue como terminamos haciendo un cuarteto y pasamos la mejor noche de nuestras vidas

Todo estaba muy loco, pero no me importaba porque estaba muy borracha y deseaba que me echaran semen por todas partes, el pene de Luis estaba azotándome en mi estrecho ano. Todo era demasiado doloroso, sin embargo, soy una maldita masoquista y me fascina que me hagan cosas sucias sin mi consentimiento.

Pedro se había quedado dormido por la ebriedad, Ezequiel estaba besando a Pedro mientras dormía y le pasó el pene por la cara. Luego entre dormido y despierto Pedro sacó su lengua y Ezequiel le metió su sanguinolento por la boca mientras gemían por tanto placer sexual. A todas estas Luis estaba con ganas de explotarme el culo, me decía que era su puta barata, me encantaba todo lo que me decía, era mi papi en esa noche y yo estaba contenta por eso.

Llevábamos como 50 minutos de penetración donde me estaban azotando por detrás y Luis estaba haciendo sonidos extraños mientras me ahorcaba y me decía “quédate quita puta, ya falta poco”. Luego empezamos a gemir duro y mi culo ya estaba inundado de semen, estaba muy caliente y húmedo, fue la mejor sensación de mi vida.

Terminamos haciendo un cuarteto y fue la mejor experiencia sexual que he tenido en toda mi vida. Después nos quedamos dormidos todos en el cuarto mientras estábamos satisfechos de tanta lujuria sexual.