En esta historia voy a contar acerca de la vez que mi madrastra me intentó seducir y terminamos teniendo un momento sexual mientras hacíamos un 69. Mi nombre es Heidi, soy una chica bastante linda, con un cuerpito hermoso y siempre suelo llamar la atención de todo el mundo, siempre he sido muy curiosa y pervertida. Esto sucedió cuando yo tenía 16 años, mi mamá se murió cuando yo estaba pequeña y desde ese entonces vivo con mi papá y su nueva esposa.
Al principio fue un poco incomodo tener que acostumbrarme a esta nueva vida y tener una madrastra que tenía muy poco tiempo conociéndola. Mi padre siempre ha sido muy bueno conmigo y siempre hemos tenido una relación muy buena, él siempre me trata lindo y yo lo adoro a él. Solamente quería verlo feliz. Entonces, no le tomé mucha importancia a su nueva vida junto a su segundo matrimonio y decidí esforzarme para llevarme bien con ella.
Su nombre es Liliana, es una mujer muy linda y joven al igual que mi papa, tiene su misma edad 33 años y su cuerpo es bastante voluminoso. La verdad es una buena persona, nunca me trató mal y siempre hacia cosas lindas por mi para que me sintiera bien cuando estábamos juntas. Mi padre casi siempre estaba trabajando y la mayor parte del tiempo que estaba en casa me la pasaba con Liliana y nos poníamos a hacer cosas juntas. No puedo creer que una noche mi madrastra me intentó seducir.
Mi madrastra era muy especial conmigo y siempre me consentía
Ella siempre me decía que quería llegar a tener mucha confianza conmigo y que ella podía ser como mi segunda madre, era muy linda y gentil. Yo me sentía muy cómoda con ella y llegamos a tener mucha confianza, siempre le contaba las cosas que me pasaban y lo que sentía y ella me daba los mejores consejos. Nos la pasábamos en la cama viendo películas y haciendo cosas de chicas, casi siempre no las pasábamos con poca ropa y notaba su grande cuerpo y estaba bien dotada.
Ella siempre me veía a mí también y hacia comentarios acerca de mi cuerpo, recuerdo que decía que ya me estaba creciendo el culo y los senos y yo me ponía rojita. Mi papá casi siempre estaba afuera de la casa por asuntos personales y se notaba que ambos estaban un poco distantes, pero no le tome mucha importancia. Liliana y yo empezábamos a pasar mucho más tiempo juntas desde que mi papá dejo de pasar tiempo con nosotras, me sentía muy bien con ella, era todo un ángel.
Recuerdo un día en que ambas estábamos acostadas a las 5 de la tarde y queríamos Salir a pasar un rato diferente y decidimos salir a algún lugar por la noche. Liliana y yo nos vestimos muy lindas y nos arreglamos para salir esa noche, luego encendió su carro y me dijo que iríamos a un restaurante a comer algo y beber. Yo casi no salía a tomar y estaba muy emocionada porque me habían invitado a salir después de tantos días de hacer siempre las mismas cosas. Esa fue la noche en la que mi madrastra me intentó seducir.
Mi madrastra me intentó seducir esa noche y yo estaba muy ebria
Llegamos al lugar como en 20 minutos, nos sentamos en una mesa y pedimos la mejor comida del menú, mientras la comida se hacía empezamos a conversar. Liliana me estaba preguntando acerca de mis relaciones amorosas y si tenía a algún galán en mi vida, me parecía un poco extraño en el momento. Sin embargo, ambas nos contábamos todo y siempre hemos tenido mucha confianza y no me preocupé tanto, le dije que no tenía ningún novio y no me gustaba nadie en este momento.
Luego vino el mesero a traérnosla comida y ambas empezamos a degustar nuestros platillos y fue una de las mejores experiencias de todas. La comida esta divina y ambas estábamos maravilladas por la calidad del restaurante, estaba todo perfecto y luego nos trajeron los licores. Nos trajeron una botella de vino de sus mejores reservas y ambas empezamos a probar, su sabor era un poco fuerte para mí, pero era rico al mismo tiempo.
Bebimos mucho y ambas estábamos muy mareadas, nos confiamos de su sabor y pensamos que no nos embriagaría. Luego nos retiramos del lugar cuando finalizamos y fuimos de regreso a la casa, llegamos y Liliana estaba muy feliz y se notaba alegre. Nos pusimos conversar en su cuarto y ella se estaba desvistiendo, decía que tenía mucho calor y se terminó quitando toda la ropa.
Que rico, mi madrastra me intentó seducir en su cama y yo estaba muy complacida
Yo estaba asombrada, ella me dijo que no me preocupara y que era algo muy normal, luego se acercó a mí mientras estábamos acostadas y me robo un beso. Yo estaba un poco ebria y me deje llevar por el momento, pero estaba confundida, mientras me seguía besando ella estaba quitándome la ropita que llevaba puesta. Se montó encima de mí y se estaba frotando la vagina con la mía y con sus deditos me manoseaba toda la panochita, me estaba empezando a gustar y le agarre su culo. mi madrastra me intentó seducir y lo logró.
Y así fue la vez que mi madrastra me intentó seducir y yo terminé con la panochita mojadita
Luego yo le empecé a dar nalgadas y le metía mis dedos en su culito, me encantaba como se sentía tener su cuerpo frotándome. Se levantó me puso en la posición 69 y me dio una mamada muy rica, mi vagina estaba húmeda y yo estaba borracha, fue la mejor sensación de mi vida. era una mujer muy sensual y yo estaba dispuesta a recibir todo el placer del mundo, su vagina era bastante saladita y se sentía rico, ella gemía muy duro y me provocaba excitación.
Yo no pude aguantar y sentía un fuerte cosquilleo en mi vagina, luego en 5 segundos mi vagina estaba destilando fluidos vaginales en la boca de Liliana. Esa mujer se mamó todo mi líquido y quedó satisfecha, terminamos exhaustas esa noche y nos quedamos en la cama dormidas sin ropa. Esa noche mi madrastra me intentó seducir y yo caí en su sucio jueguito.
