En este artículo hablaré acerca de la vez que me terminaron cogiendo bien duro, ese día fue uno de los mejores de mi vida. Mi nombre es Sofía, tengo 18 años y me encanta salir a fiestas con amigos para bailar disfrutar y coger como puta. En una ocasión decidimos salir a reunirnos en casa de un amigo que tenía una mesa de pool en su casa para pasarla bien y emborracharnos, nunca pensé que tendría una orgía con mis amigos.
Esto sucedió en unas vacaciones de verano, estábamos algo aburridos porque queríamos disfrutar al máximo, puesto que, teníamos tiempo sin vernos por las clases. Mi grupo de amigos y yo planeábamos reuniones para ver películas todos juntos y divertirnos haciendo cosas alocadas, necesitaba que me metieran la verga en mi culo. Éramos 4 mujeres y 4 hombres, hacíamos parejas perfectas, a mí me gustaba un chico en especial que era bastante atento, delicado y tenía un bulto enorme que se le notaba desde el pantalón.
Se llama Rafael, es un chico alto, blanco con cachetes rosados, fornido y muy sexy, lo que más me impactaba de él eran sus habilidades de seducción. En varias ocasiones habíamos tenido roses eróticos y amorosos, pero no habíamos llegado a nada solamente era coqueteo, yo sabía que le gustaba y él sabía que a mí me gustaba. Rafael me trataba muy lindo a mí en particular, él era muy gracioso y simpático con todos, pero conmigo era una persona totalmente distinta, toda una bestia sexual. Es increíble tener una orgía con mis amigos.
Contaré todo acerca de la vez que tuve una orgía con mis amigos
El resto del grupo también estaba como que comprometido, todos sabían que les gustaba alguien, pero no se había concretado nada, por ahora. Entonces yo conversaba con mis amigas y bromeábamos acerca de que todas queríamos que los chicos nos metieran el guevo entre las nalgas, nos encantaba hablar de nuestros deseos sexuales. Todas me contaban acerca de los que les gustaban y yo les conté acerca de todo lo que sentía por Rafael, que quería sentir su piel rozando la mía y que deseaba que me diera fuertes embestidas con su pene.
La última vez que habíamos salido decidimos hacer una fiesta para celebrar el cumpleaños de una de mis amigas y tomamos la iniciativa de enloquecernos con los hombres. Los invitamos y nos pusimos en una silla a bailarles como putas de prostíbulo, pero sin los billetes, ellos también nos bailaron a nosotras. Ese día fue épico, Rafael me bailó muy rico y sensual, se sentó encima de mí restregándome su verga por la cara y me frotó en mi vagina mientras me suspiraba en el cuello. Ese día deseaba tener una orgia con mis amigos, pero no se pudo dar la ocasión.
Entonces, como ese día todas habíamos quedado con las ganas de llevar pene hasta atragantarnos, no nos pudimos aguantar y empezamos a planificar la siguiente salida. Decidimos reunirnos en casa de uno de nuestros amigos que se llama Ezequiel, puesto que, él vive solo y en su casa hay una mesa de pool. Por eso, en el momento en que todas estuvimos de acuerdo le contamos a los muchachos nuestra idea para ver que opinaban, Ezequiel y Rafael quedaron maravillados con la idea.
Rafael me volvía loca y deseaba que me azotara con su pene
Obviamente aceptaron la propuesta porque ellos tenían el mismo deseo sexual que nosotras teníamos por ellos, ya estábamos a punto de obtener lo que todos queríamos. Entonces quedamos para comprar unas botellas de alcohol para emborracharnos mientras jugábamos pool en la casa de Ezequiel. El día llegó y todos estábamos preparados para lo que pasaría esa noche, llegamos a la casa de Ezequiel y los muchachos estaban más apuestos que nunca y muy hiperactivos. Todos queríamos tener una orgia con mis amigos y gozar como salvajes en esa casa.
Nos atendieron como nunca antes, nos ofrecieron comida, licor y luego nos llevaron a la mesa de pool donde terminamos jugando toda la noche. Me sentí muy consentida, Rafael estaba muy apegado a mí, me abrazaba mucho, me decía lo mucho que me adoraba y me hacía muchas caricias. Yo le respondía a todos sus estímulos porque soy muy amorosa y le tengo mucho cariño y confianza a él, ya sentía como me iba a penetrar esa noche.
Empezamos a jugar y beber todos en la mesa de pool, parecía la noche perfecta, todas mis amigas estaban junto a sus hombres jugando y disfrutando de los efectos del alcohol. Me fascinaba sentir el cuerpo de Rafael junto a el mío, ya ambos estábamos un poco mareados por el alcohol, el cada vez se ponía a tocarme más y acariciar mis partes nerviosas. Entonces, empezábamos a notar que los demás estaban en lo suyo, unos estaban basándose en una esquina, y otros estaban pegados cerquita sintiendo deseos sexuales.
Ya estaba a punto de hacer una orgia con mis amigos, el momento más feliz de mi vida
Mientras todo esto sucedía Rafael y yo estábamos muy pegados, el comenzaba a decirme que estaba muy bonita y que le encantó la forma en la que le bailé aquella noche. Yo me sonrojé y le respondí que solamente había hecho eso conmigo, que era mi primer hombre, el quedo impactado y emocionado.
Rafael: ahh con que soy el primer hombre al que le pasas tu culo por la cara, sinceramente quede muy excitado después de todo lo que me hiciste.
Yo: jejeej sip, eres el primer hombre al que le doy tanta confianza como para sentarme en sus piernas y frotarle mis partes con su enorme bulto. También quedé impactada cuando me empezaste a acariciar en la silla y me tocabas mucho mis partes sensibles.
Rafael: ahh entonces quieres decir que también quedaste con ganas de mas, te voy a seguir tocando muy rico y acariciarte las partes que no pude tocar aquella noche.
Yo: uuhh, sería demasiado rico papi, no tienes ni idea del deseo sexual que tengo por ti, quiero que me tomes y me empieces a manosear como si fuera tu puta.
En el momento en que dije eso Rafael empezó a besarme apasionadamente, me montó encima de él y estaba acariciándome el culo. Yo nunca antes había vivido algo tan intenso con un hombre, el chico que me encantaba desde hace tiempo me iba a coger duro en unos minutos y estaba muy ansiosa. Le soltaba ligeros gemidos en ocasiones para que se volviera loco y esto hizo que se bajara el pantalón y se sacara su enorme pene, me volví loca al instante y empecé a manosearlo por instinto.
Yo estaba más caliente que una puta de prostíbulo durante la orgía con mis amigos
Empecé a sentir su enorme pene en mis manos y estaba ansiosa porque me lo metiera por la vagina, entonces nos fuimos para una esquina y me quité la ropa quedando totalmente desnuda. Rafael quedo maravillado ante ese erótico momento, comenzó a desnudarse y me pasaba su pene por todos lados, estábamos muy calientes y me puso su pene en mi boca. No nos habíamos dado cuenta de que todos estábamos teniendo sexo en la misma habitación, unos estaban en la mesa del pool, en el sofá, otros por la puerta y nosotros en la esquina. Estaba en una orgía con mis amigos y era demasiado rico.
Cuando me di cuenta de eso empecé a sentirme mucho más excitada porque el ambiente era muy sádico y todos andábamos muy cerdos y cochinos. Agarre el pene de Rafael y me atragante con él durante 10 minutos dándole la mejor mamada de su puta vida, luego me azotó contra la pared y me empezó a frotar con su pene. Mi vagina estaba muy dilatada y estaba comenzando a mojarme toda, sobre todo cuando me empezó a meter su pene poco a poco, fue la mejor sensación del mundo.
Siempre había anhelado tener una orgía con mis amigos
Mis amigos seguían cogiendo, la habitación parecía un putero, unas estaban mamando vergas, otros estaban rompiéndose el culo y yo estaba a punto de sentir un guevo dentro de mí. Yo gemí bastante cuando Rafael me empezó a penetrar fuertemente y a decirme insultos sexuales que me volvían loca, ese papi sabía como romperme y hacer que me retorciera. La mejor orgía con amigos del mundo.
Yo: ufff papi rico hazme tuya, quiero ser tu puta rica, me encanta que me metas el pene así de fuerte.
Rafael: ohh sisis, sigue mi amor, me encanta que me digas estas cosas, eres mi putica linda, quiero que me pidas leche, ya estoy a punto de venirme.
Yo estaba retorciéndome toda con todo lo que me estaban haciendo, era primera vez que tenía un encuentro sexual así de fuerte. Cogimos durante 25 minutos hasta que Rafael me acabo encima, sacó su pene y me lleno las tetas y la cara de leche. Yo quede exhausta y nos acostamos a dormir hasta el día siguiente, alrededor todos seguían cogiendo, estábamos muy ebrios. Fue una orgía con mis amigos realmente única.
Después de ese momento cada vez que salíamos todos sabíamos lo que quería cada quien y estábamos preparados para coger como salvajes. Yo nunca más me quise despegar de Rafael ya era su esclava sexual y me fascinaba la idea.
