Mi nombre es Mariana, tengo 18 años, me encanta salir a fiestas y emborracharme con mis amigos hasta el amanecer, me pongo cachonda cada vez que bebo. Yo tengo a mi novio, es un chico demasiado divino, su cuerpo es de chocolate y me encanta la manera en la que me coge, me convierte en su golfa. Cuando estamos en la cama, soy toda suya y andamos cogiendo en cualquier lado que se nos antoje. Una vez me encontraron cogiendo con mi novio aquella vez que nos quedamos en casa de uno de nuestros amigos.
Cada vez que salíamos a beber estábamos en grupo, somos un grupo pequeño, pero gozamos demasiado, todos son muy divertidos y mente abierta. Mi novio se llama Alvaro, el es el hombre que me mueve el piso, siempre me trata de coger en todas partes sin importar donde estemos y eso es lo que más me encanta de él, adoro el sexo espontaneo. Nuestros amigos son Luis, Ezequiel y Javier, hacemos reuniones los fines de semana y hacemos locuras mientras bebemos.
Me encanta pasarla con ellos porque siempre tienen ideas muy alocadas y todos somos muy graciosos, hallamos la manera de divertirnos todo el tiempo. Por eso siempre andamos para todos lados juntos, mi novio y yo siempre andamos besándonos y tocándonos en frente de ellos cuando queremos. No les importa que hagamos eso, siempre bromean acerca de nosotros y se excitan en ocasiones, pero nada fuera de lo común.
Adoraba salir con mis amigos y prender el queso con mi novio
Mi novio y yo estamos en nuestro mejor momento, cogemos todo el tiempo, es una maquina sexual y le encanta dejarme la vagina toda roja de tanto azote que me da con su falo. Soy toda una perra, me encanta recibir güevo todo el tiempo, siempre consigo todo lo que quiero y no me da pena nada. Somos muy alocados, por eso, una vez que andábamos en la cama nuestros amigos me encontraron cogiendo con mi novio por la madrugada.
Nunca me hubiese imaginado que eso llegaría a pasar alguna vez, normalmente nosotros prendemos el queso frente a ellos y es algo muy común. Pero, nunca en la vida hemos cogido en frente de alguien, ya eso es un extremo y es algo más fuerte para nosotros, ambos nos asustamos un poco cuando nos descubrieron. Eso sucedió un día que fuimos a tomar en la casa de Luis, es demasiado grande, tiene piscina, un patio trasero, y varios lugares amplios para distraerse.
Entonces teníamos pensado beber como de costumbre en su casa, bañarnos en la piscina, jugar pool y hacer otras actividades divertidas. Entonces, nos empezamos a poner manos a la obra, comenzamos a preparar los tragos y a ponernos en alta. El team estaba completo, todos estábamos dispuesto a emborracharnos para pasar la mejor noche de nuestras putas vidas, yo deseaba tener sexo alocado con Alvaro cuando todos estuvieran inconscientes.
Yo era la única chica que estaba esa noche, los muchachos se veían irresistibles, no voy a negar que mis amigos están divinos y se ven bien dotados. Sin embargo, nunca he salido con ninguno de ellos, yo adoro a Alvaro y siempre ando pensando en él, no me atraen sexualmente nuestros amigos, o eso creía.
Estaba cogiendo con mi novio en el patio y me encontré con una sorpresita
Empezamos a tomar y a jugar juegos de borrachos, íbamos a jugar yo nunca, se estaba empezando a poner impresionante y divertida la noche, sacando trapitos. Me enteré de muchas cosas jugando ese juego, ya todos estábamos demasiado ebrios, mis ganas de tener sexo aumentaron. Entonces después de unos 10 minutos Alvaro y yo nos fuimos para el patio trasero y empezamos a seducirnos poco a poco para empezar a tener sexo salvaje sin que nadie nos viera.
Obviamente, pudimos habernos metido en alguno de los cuartos de la casa de Luis, sin embargo, las ganas de coger que tenía no eran normales y yo adoro la adrenalina y coger al aire libre. Entonces empezamos a manosearnos y nos quitamos la ropa, Alvaro estaba más cachondo que nunca y yo andaba modo perrita sucia, tenia ganas de llevar pene hasta por la garganta y sabia que mi hombre iba a complacer todas mis peticiones.
Estaba cogiendo con mi novio demasiado rico, deseaba tener a ese hombre metido en mi vagina toda mi vida, adoraba la manera en la que me azotaba mientras me tenía contra la pared. El pene de mi novio es gigantesco, grueso, venoso y jugoso, amo como me rompe la vagina, estaba toda mojadita y sonaba a chancletazos.
En un momento en el que ambos estábamos super excitados, yo estaba a punto de correrme por segunda vez cuando veo que estaba Luis y Javier detrás de nosotros viendo todo. Andábamos asustados los dos, no esperábamos que los muchachos estuviesen despiertos, ya eran las 4 de la mañana y todos estábamos ebrios, me sentí muy apenada.
¡Lo mejor que me ha pasado en la vida es que me hayan encontrado cogiendo con mi novio, adoro sentir muchos penes!
Los muchachos estaban cachondos, querían cogerme entre toditos, les había gustado vernos cogiendo y se desnudaron. Pude ver el gigantesco pene de mis amigos, estaban muy erectos y se veían deliciosos, me provoco y comencé a chupársela a ambos simultáneamente. Ellos gemían mucho mientras le daba la mejor mamada de mi vida, su pene estaba muy jugoso, luego dejé de chupársela y seguí recibiendo pene de Alvaro mientras ellos observaban todo lo que hacíamos.
Andaban masturbándose mientras me manoseaban por todo el cuerpo, andaba cogiendo con mi novio mientras mis amigos me estaban manoseando las tetas y me dedeaban el culito, estaba gozando placer por todos lados, adoro ser la putita del grupo. Andábamos muy excitados y yo deseaba tenerlos a toditos encima de mi toda la noche. Alvaro no podía aguantar más le excitaba mucho ver como sus amigos me manoseaban y se masturbaban por mí, además mi vagina estaba muy estrechita y mojadita.
Me echó toda su leche dentro de mi panochita y me dejó gimiendo como una putica de esquina, adoré sentir su leche. Esto ocasiono que Luis y Javier enloquecieran del placer y me empezaron a eyacular en la cara mientras yo abría la boquita para recibir mi chicha. Lo mejor que me pudo pasar es que me encontraran cogiendo con mi novio.
