¿Sexo con mi tío? ¡Jamás lo hubiera imaginado!
Soy una adolescente que se masturba y aprendió a jugar con su cuerpo desde que tenía 13 años. Ayer lo estaba haciendo como de costumbre, pero terminé teniendo sexo con mi tío sin poder evitarlo.
Todo comenzó a la hora de la cena, estuve cenando con mis padres y con mi tío que es un adolescente solo un par de años mayor que yo.
Él vive con nosotros porque está estudiando en la universidad que queda en nuestra ciudad. Así, mis abuelos no tienen que gastar mucho dinero en hospedaje, ya que mi mamá está encantada de tener a su hermano aquí.
Yo todavía estoy en la secundaria, así que las pocas veces en que puedo tener contacto con mi tío es durante la cena o en los fines de semana. Aquella vez, mis padres nos informaron que tenían una celebración de trabajo y que probablemente iban a llegar muy tarde en la madrugada. Le encargaron a mi tío que me cuidara y que por favor no saliera de casa esa noche para que no me quedara sola. Él aceptó esto sin problemas y aseguró que se encargaría de que estuviera a salvo.
Yo nunca había pensado en tener sexo con mi tío, porque de hecho, lo veía como un hermano, pues compartimos juntos nuestra niñez. Pero esa noche, mis sentimientos hacia él cambiaron drásticamente.
Me masturbo sin pensar en tener sexo con mi tío
Mis padres se fueron a su fiesta y mi tío y yo quedamos en la sala viendo televisión. Terminamos de ver una película y luego nos despedimos diciendo que iríamos a dormir. Hasta el momento no había pasado nada raro.
Yo siempre me masturbo antes de dormir, de hecho, casi nunca puedo dormir si no lo hago. Así que, me di una ducha, me puse mi pijama, pero esta vez decidí quedarme sin ropa interior para poder tocar mi vagina a gusto. Pocas veces puedo hacerlo así, sin la preocupación de que alguien entre a la habitación y me descubra (mi tío nunca venía aquí, así que estaba tranquila).
Me metí en la cama y busqué algunos videos sexis para motivarme. Suelo ver videos de chicas, me gusta ver cómo se tocan, se masturban y acarician sus pezones. Aunque no soy lesbiana, eso me excita mucho. Usé mis audífonos para poder escuchar sus deliciosos gemidos.
Ni siquiera me molesté en poner el seguro a la puerta, estaba segura de que mi tío no vendría aquí. Viendo los videos mi vagina comenzó a humedecerse, así que instintivamente con una mano me masajeaba los pezones. Luego, bajé a mi vagina y empapé mis dedos con mi lubricación. Para después, frotar mi clítoris y darme placer.
La velocidad de los movimientos con mi mano aumentaba paulatinamente y no pude evitar soltar algunos gemidos de placer. Cerré mis ojos e imaginé que todas esas sensaciones no eran provocadas por mi mano, sino por la lengua de un chico guapo. Entonces, mis caderas empezaron a retorcerse y mi vagina a expulsar cada vez más lubricación.
Tengo sexo con mi tío después de que me descubre masturbándome
En un momento abrí los ojos (antes de llegar al orgasmo) y me quedé helada al ver que mi tío estaba parado justo frente a mí, viéndome con una expresión que no puedo explicar.
Tan pronto como pude reaccionar tomé una sábana y me tapé. No quería que él viera mi cuerpo desnudo. No estaba feliz de que él me hubiera descubierto, estaba preocupada y quería que él se fuera.
Él empezó a hablar y de una manera amable me dijo que todo estaba bien y que no le contaría a mis padres nada de eso. Dijo que estaba bien que me masturbara porque todo el mundo lo hace. Además, me preguntó si alguna vez había tenido sexo con un chico o si había visto a un chico hacerlo.
Le respondí que no y esto era cierto. Pero me di cuenta a través de su pijama, que su pene se había puesto muy duro y se veía realmente grande. Él se dio cuenta de que estaba mirando su pene, por lo que se acercó a mí y se sentó a mi lado en la cama. Sacó su pene de sus calzoncillos antes de que yo pudiera decir algo y lo cogió con una mano frontándolo hacia arriba y hacia abajo.
Lo miré fijamente y le dije que esto no estaba bien. Sin embargo, él me prometió que no haríamos nada, solo él me vería a mí y yo lo vería a él.
Por alguna razón me dejé convencer y mi vagina se sentía como si palpitara. Mi tío siguió acariciando su pene y yo abrí mis piernas para seguir frotando mi clítoris.
Tuve sexo por primera vez con mi tío
Al principio no dijimos nada, solo nos masturbamos uno mirando al otro. Pero, me entraron muchas ganas y no podía dejar de pensar en ese pene metido dentro de mi vagina.
No sé que me pasó, pero de un momento a otro, me acerqué a él y extendí mi mano, le dije que quería sentirlo. Él no se negó y tomo mi mano para enseñarme cómo debía frotar su pene. Se sentía demasiado bien su piel entre mis dedos y vagina aumento la lubricación de inmediato.
Aunque no había follado con nadie, yo ya me había desvirgado hacía un tiempo mientras me masturbaba. Así que, eso no me preocupaba.
Mi tío me dijo que podía sentarme en su pene si lo quería y así lo hice. A medida que su pene se introducía por mi vagina, corrientes eléctricas se producían por todo mi cuerpo. Esto era mejor que meterme los dedos.
Todavía era una inexperta y lo mejor que pude hacer fue subir y bajar en su pene cada vez más rápido. Era doloroso, pero muy excitante. Él apretaba con sus dos manos mis pezones y gemía muy fuerte. Después bajó una de sus manos a mi clítoris y lo frotó con mucha experiencia. Una energía muy fuerte se acumuló en mi vientre e inevitablemente explotó, tuve mi primer orgasmo real teniendo sexo con mi tío.
Él me preguntó si quería probar su semen, yo respondí que sí. Entonces, acercó su pene a mi boca y me lo empujó hasta la garganta varias veces, hasta que todo su semen explotó dentro de mí.
Fue la mejor noche de mi vida. Desde entonces tengo sexo con mi tío todas las noches mientras mis padres duermen.