Quería coger con un amigo del colegio y termine cogiendo con su padre

En esta historia voy a hablar de la vez que deseaba coger con un amigo del colegio y termine cogiendo con su padre, no era lo que tenía planeado, pero no estuvo mal. Mi nombre es Wilmar, para la ocasión en la que sucedió este acontecimiento yo tenía 15 años, soy una chica morena, soy curiosa y tengo una figura bastante atractiva. Esto sucedió en un evento del colegio donde asisten todos los estudiantes acompañados de sus padres para festejar, yo estaba pendiente de un chico muy apuesto y quise aprovechar para sonsacarlo.

Mi amigo del colegio se llama Ernesto, ese mucho me traía loca desde hace mucho tiempo, siempre pensaba en miles de posibilidades en las que él me metía su polla. Ernesto era muy apuesto, fornido y siempre tenía un aroma muy sensual, realmente no nos conocíamos mucho, pero deseaba devorármelo en su cama. El colegio en el que estudiábamos tenía renombre, por eso era muy común ver personas de otras ciudades estudiando allí.

Yo si vivía en la ciudad donde se encontraba mi colegio, sin embargo, Ernesto vivía en otra ciudad a 2 horas de distancia aproximadamente. Yo empecé a conversar con el papá de Ernesto, un sujeto muy simpático, con un buen sentido del humor y bastante apuesto. Mi objetivo era decirle que quería conocer su ciudad  disfrutar de unas pequeñas vacaciones con ellos en su casa para coger con su hijo. El señor estaba muy entusiasmado con la idea, nunca pensé que terminaría cogiendo con su padre.

La historia de la vez que quería coger con Ernesto y terminé cogiendo con su padre

Decía que le encantaba recibir visitas y que no habría problema alguno, ahora el detalle era convencer a mi madre. El señor conoció a mi mamá y le pareció un adulto muy agradable y racional, le planteo lo del viaje y mamá dudó un poco en darme permiso. Yo le supliqué que por favor me diera permiso, que yo le hiciera lo que quisiera y que solo serian 4 días y me regresaría. Finalmente aceptó por alguna razón, seguramente la aturdí con ms súplicas.

Yo estaba muy emocionada, duré toda la noche hablando con Ernesto acerca de todo lo que íbamos a hacer y pasamos una noche genial. Al día siguiente ya iba a irme con ambos para mis pequeñas vacaciones sexuales junto a Ernesto y su padre, me excitaba de tan solo imaginármelo. Los esperé donde ellos me dijeron que los esperara y me pasaron recogiendo en su carro.

El padre de Ernesto: ¿hola Wilmar como estas? Espero y disfrutes del viaje y la pases de maravillas, vamos a hacer todo lo posible para consentirte jejeje.

Yo: hola señor, muchas gracias por todo, realmente estoy agradecida por esta gran oportunidad, estoy ansiosa por todas las cosas que vamos a hacer. Ernesto para mí es un gran amigo y ya quiero disfrutar de muchas aventuras junta a él, jejeje. –dije con una voz picara mordiendo mis labios-

Ernesto: si, nosotros también estamos muy emocionados de tenerte en la casa, teníamos tiempo que no llevábamos visitas. También me agrada mucho que por fin podamos disfrutar a fuera del salón de clases Wilmar, vamos a disfrutar de muchas cosas.

Me encantaba como me trataban esos dos hombres divinos

En el momento en que dije eso noté que el padre de Ernesto había captado que yo quería mucho más que diversión, que deseaba que me penetraran duro. Se rió con una cara de pervertido y siguió manejando, hasta ese momento no me había dado cuenta que me quería coger hasta romperme, Que rico terminar cogiendo con su padre. Pasamos todo el viaje conversando normalmente hasta que llegamos a su casa, estábamos muy emocionados y sacamos las maletas del carro.

Me dijeron que colocara las cosas en el cuarto y que me relajara, estaba muy emocionada y les hice caso, coloque mis cosas en donde dijeron y empezamos a conversar. Ernesto y su padre tenían planeado invitarme a comer helado esa misma tarde cerca de su casa, me fascinaba la idea, puesto que, amo el helado. Eran como las 2 de la tarde y fuimos a la heladería a pedir nuestros helados, llegamos y empezamos a comer helado en un lugar súper hermoso con música relajante.

Ernesto y su padre me estaban sacando conversación acerca de las cosas que me gustaban, mis comidas favoritas y me llegaron a preguntar si tenía pareja. Me encantaba que me preguntaran eso, les dije que no tenía novio ni nada por el estilo y les dije como me gustaban los hombres, para que Ernesto se motivara. Estaban muy atentos a todo lo que decía, sin embargo, empezaba a notar más interés por parte del padre de Ernesto que de su propio hijo, no le tomé importancia.

Quería que me cogiera Ernesto, pero terminé cogiendo con su padre

Terminamos de comer helados y fuimos para la casa de nuevo a descansar y relajarnos hasta el siguiente día. Llegamos a la casa y nos acostamos en el cuarto los 3 a ver televisión mientras nos recuperábamos del viaje, estaba muy exhausta. El padre de Ernesto se levantó de la cama a hacer algo y nos dejo solos a su hijo y a mí, aproveché el momento para conversar a solas con él y seducirlo. Le dije que me parecía muy apuesto mientas le acariciaba el cuello, también le dije que me encantaba estar allí con él.

Ernesto: si que delicia estar acostado contigo Wilmar, también me pareces una niña muy sensual y creo que me provocas mucho, desearía poder estar solo contigo para hacer cosas indebidas.

Yo: uhhh que cositas dices, me estás sonrojando mucho y cada que me susurras me dan ganas de que me cojas bien duro y me rompas.

En ese momento había mucha tensión entre ambos, estábamos en la cama acostados mientras nos acariciábamos y decíamos cosas sucias. Estábamos a punto de coger, pero de repente abrieron la puerta y era el papá que había regresado, menos mal que no habíamos empezado. El señor entró y se puso a ver televisión con nosotros en la cama, Ernesto y yo estábamos muy cerca cuando llegó pero creo que no notó lo que pasaba exactamente.

Me puse muy puta mientras estaba cogiendo con su padre

Seguimos bien televisión durante toda la noche hasta que todos os quedamos dormidos exhaustos del sueño. Al día siguiente ocurrió algo que no me esperaba, mi sorpresa empezó cuando abrí los ojos en la mañana al despertarme, estaba el padre de Ernesto acostado junto a mí dándome ligeros besos en las mejillas y los labios. Mi reacción fue sorprenderme y no sabía qué hacer, me lo quedé viendo con una cara ruborizada y apenada. Quería coger con el hijo y termine cogiendo con su padre

El padre de Ernesto: shh tranquila mi niña, no pasa nada, solo estamos tú y yo. Ernesto salió temprano a casa de su tía y no se va a enterar de esto.

Yo: ehhh, esto está demasiado raro, me siento un poco incomoda.

El padre de Ernesto: tranquila mi niña, yo noté anoche lo que querías hacer con mi hijo y la verdad me calentó el pene como no tienes idea, por eso voy a cogerte bien duro para que disfrutes. Quiero que te dejes llevar. –Me dijo mientras me besaba el cuello y acariciaba mis senos-

Yo: uff, está bien me voy a dejar llevar papi, me fascina como me tocas y quiero que me cojas duro por mi panochita.

Me inundaron mi panochita de leche y me sentí muy rica y complacida

El padre de Ernesto me tenía gimiendo como una puta, era la primera vez que estaba con alguien mayor y su pene se sentía enorme. Sacó su enorme pene y me lo empezó a hincar en mi vagina, me quitó la faldita que tenia y arrancó mis pantaletas, yo estaba gimiendo como niña y muy mojadita. Metió la cabeza de su pene mientras me frotaba para dilatarme, yo no aguantaba el dolor de esa polla tan inmensa. Mi objetivo era coger con Ernesto pero cogiendo con su padre se me olvidó todo.

Yo: aaaaahhff, que rico papi, me está doliendo mucho tu pene es demasiado grueso y me vas a destrozar la panochita.

El padre de Ernesto: que rico totona tienes pequeña niña linda, desearía tenerte viviendo aquí por siempre para destrozarte a diario.

Me metió la verga entera y yo estaba sufriendo y gozando al mismo tiempo, le pedía que me echara leche en todas partes, estaba ansiosa por qué me eyaculara. Duramos en una cogida intensa por 30 minutos seguidos, yo estaba toda cansada y mi panochita estaba rojita y dilatada, me acabó adentro inundándome toda la chocha. Solté un grito fuerte cuando me daba embestidas mientras eyaculaba, mi vagina estaba caliente y apretada con esa verga inmensa dentro de mí, me terminó chupando la chocha dejándomela limpiecita.

Quería coger con Ernesto, pero nunca pensé que terminaría cogiendo con su padre, guardamos el secreto y cogimos el resto de los días. Ernesto nunca supo nada y yo pasaba más tiempo con su padre buscando que me volviera a romper mi chochita.